Tenía 55 años y desde hacía un tiempo padecía de un problema renal.
Las ausencias temporarias, siempre, traen nostalgias y añoranzas, pero hay otras ausencias, las definitivas, las que suman todos los silencios a la partida, que dejan el dolor en el alma, una herida que el tiempo muchas veces puede calmar.
Pero, lamentablemente, ese es el destino de la vida, alegrías y sonrisas, dolores y lágrimas,y el tiempo como un bálsamo que alguna vez llega a nuestras almas, no con olvido, que no llega nunca, pero sí con resignación.
FALLECIÓ A LOS 55 AÑOS
El último día de enero, en la ciudad de Junín, donde estaba siendo tratado de una dolencia renal que padecía desde hacía unos años, dejó de existir, a los 55 años, el conocido vecino casarense Omar Néstor Sánchez.
Integrante de una reconocida y antigua familia casarense, Oscar Néstor Sánchez era único hijo del matrimonio que forman Bernardo «Berna» Sánchez y «Nena» Calvo, casado con Lilian Molina, padre de dos hijos que dieron a su vida, pese de su temprana partida, el calor necesario y el impulso para un tránsito feliz, a pesar de los problemas de salud que lo acosaron desde hacía años, debiendo realizarse diálisis a raíz de un problema renal que fue minando sus resistencias físicas. Estaba a la espera de un transplante, que, lamentablemente, no llegó en el tiempo deseado y la muerte lo sorprendió joven aún, en esa lucha por la supervivencia.
Dedicado, junto a su padre, desde muy joven a las tareas de transportista, primero y rurales luego, su vida, a pesar de una salud deficiente, se desarrolló con normalidad y dentro de un clima de optimismo y esperanza, que le daba la fuerza necesaria para seguir en esa lucha, que, finalmente, lo doblegara y sumiera en el profundo dolor a sus familiares y amigos.
Ese dolor se vio reflejando en el acto de su velatorio y la inhumación de sus restos mortales el domingo 1º de febrero a las 10 hs. en el Cementerio Municipal, previo responso religioso rezado en
Con Omar Néstor Sánchez nos deja un muy buen vecino, excelente hijo, esposo y padre de familia, que se deja como herencia incomparable un puñado de hermosos recuerdos que lo perdurarán en el tiempo.