PERSECUCIÓN POLICIAL
El sábado a la madrugada la policía detuvo en pleno centro a muchachones que picaban en sus autos
No les importa nada ni nadie. El mojarle la oreja a la policía y burlarse de las reglas de tránsito pareciera ser una diversión de los muchachos de la madrugada, que, entonaditos con alcohol y al comando de los potentes autos de sus papás, no tienen mejor idea que hacer picadas de madrugada. También los chicos en moto, que eligen como «pista» para dichas picadas la Avda. San Martín, desde la planta de silos de Grobocopatel hasta el cementerio, pasando por la comisaría.
PERSECUCIÓN POLICIAL
El sábado, la policía detectó a varios jóvenes picando en sus autos por la ciudad, e inició una persecución que terminó con la detención de dos de ellos, y el secuestro de sus respectivos autos. Infracción y multa mediante, es probable que la próxima semana o tal vez hoy o este fin de semana, vuelvan a sus delirios pisteros, eligiendo el centro de la ciudad para sus derrapes y aceleradas.
Creemos necesario una política tanto desde el municipio como desde la policía para terminar con estas locuras de madrugada, que solo pueden terminar en tragedia. El «a todo bueno» se ha convertido ya en un estilo de vida en nuestra ciudad, que es necesario terminar. O se ponen las pilas o nuestra ciudad se convertirá en un caos, no sólo de madrugada sino a todas las horas del día. Vean, señores inspectores, la cantidad de motociclistas que circulan con escapes libres y sin casco, que pasan a toda velocidad por semáforos en rojo y hacen zigzag entre los autos poniendo en riesgo sus vidas y las de ocasionales transeúntes. Observen señores la cantidad de autos que doblan en U, cuyos conductores estacionan en cualquier lado, algunos incluso sobre las veredas. Las quejas que recibimos del vecindario en nuestra redacción son innumerables. La gente pide que hagan algo, y dan como ejemplo a otras ciudades en las que el orden es total y el tránsito se respeta.
Cero tolerancia no es intolerancia. Es permitir lo que está permitido y sancionar lo que no.