miércoles, 22 de junio de 2011

editorial

EL LADO POSITIVO

El alto nivel de participación ciudadana que demandará la conformación de unas 10 listas de precandidatos para definir quiénes serán los candidatos que aspiren a regir los destinos de Carlos Casares, muestra el lado positivo de la diversidad de pensamientos con relación a las próximas elecciones primarias abiertas del 14 de agosto. Alrededor de 200 vecinos han decidido asumir el compromiso de trabajar para Carlos Casares, tal vez enarbolando proyectos distintos desde la política, aunque en lo que concierne al ámbito local, es probable que confluyan en un ideario común, tendiente a lograr una mejor calidad de vida atendiendo prioridades básicas como la salud, la seguridad, la educación y la asistencia de los que menos tienen y más necesitan. De esos 200 vecinos, una gran parte quedará en el camino. Al no triunfar sus listas, se verán privados de poder ejercer una participación activa para dar lugar a aquellos que han sido elegidos por la ciudadanía. Pero pasarán a formar una especie de reserva moral que no debe ser desperdiciada. Han querido ser intendentes, concejales y consejeros escolares, han querido tener voz en la toma de decisiones, conscientes al prestar sus nombres en las listas, que los cambios y las correcciones se logran participando.

Es así como vecinos capaces, de sólida formación ciudadana, quedarán afuera, sin que lamentablemente sean incluidos en las listas de que aspiran a lograr el favor de la ciudadanía y acceder al gobierno comunal. Queda en el criterio de quienes triunfen en las próximas primarias abiertas, el abrir dichas listas para permitir el ingreso de aquellos que por sus condiciones, su prestigio y vocación política, puedan brindar un aporte importante a la propuesta con miras a las elecciones generales del 23 de octubre.