LAS CONDENAS POR LA TRAGEDIA DE CROMAGNON
CHABAN: 20 años
EL REPRESENTANTE DE CALLEJEROS: 18 años
EL POLICÍA COIMERO DÍAZ: 18 años
CALLEJEROS: Absueltos
EL REPRESENTANTE DE CALLEJEROS: 18 años
EL POLICÍA COIMERO DÍAZ: 18 años
CALLEJEROS: Absueltos
Todo para el explotador del local, el representante del grupo musical Callejeros, y un policía coimero al que le pagaron por «no hacer». Nada para los músicos.
El miércoles en medio de un impresionante operativo policial y una multitud conformada por padres y allegados de las víctimas y fans del grupo Callejeros, la justicia dio a conocer su sentencia.
Para Omar Chabán, el excéntrico explotador del local Cromagnón en el cual se desarrolló el recital de la tragedia, le dieron 20 años de cárcel por coautor de incendio doloso seguido de muerte. Por los mismos cargos fue condenado a 18 años de prisión el representante del grupo Callejeros, Diego Argañaráz, mientras que a las dos funcionarias municipales que no controlaron que el local cumpla con las especificaciones necesarias en materia de seguridad, Ana María Fernández y Fabiana Fiszbin 2 años. Al asistente de Chabán, Raúl Alcides Villarreal, 1 año por el pago de coimas a la policía.
El grupo Callejeros (Fontanet, Delgado, Torrejón, Vázquez, Carbone, Djerfy, Cardell, Belay y Torres), para indignación de los familiares de las víctimas, fue absuelto. El tribunal consideró que si bien la banda toleraba el uso de la pirotecnia en sus recitales, no participaron en el hecho doloso. «No hubo voluntad de los músicos de provocar el incendio», se pronunció el tribunal.
En el recinto se produjeron dramáticas escenas con gritos, desmayos y crisis de nervios, arremetiendo algunos familiares contra los vidrios blindados que separaban a los acusados del público, generándose en las afueras de tribunales una descomunal gresca entre la policía, los familiares de las víctimas que habían quedado afuera y simpatizantes del grupo Callejeros. Si bien al conocerse las condenas de Chabán y Argañaraz se escucharon aplausos y gestos de satisfacción entre la concurrencia y en las afueras de tribunales (la gente escuchaba la sentencia por televisión desde los bares), cuando se anunció la absolución de Callejeros.
LA EXPLICACIÓN
Según el tribunal, al pronunciar su fallo entiende que quienes se llevaron la peor parte, Chabán y Argañaráz fueron los organizadores del recital, y como tales asumieron el papel de «garantes» del espectáculo y por lo tanto responsables de la seguridad física de los asistentes al mismo, encontrándoselos también responsables de haber pagado coimas para que la policía hiciera la «vista gorda».
En cuanto a los que arrojaron las bengalas o candelas, el tribunal consideró que no tenían dominio del hecho, y que por lo tanto no tomaron en serio las advertencias del organizador Chabán.
EN LIBERTAD
Hasta tanto la sentencia no quede en firme, nadie irá preso. Se presume que vendrán las apelaciones, por lo que podrá pasar mucho tiempo hasta que los condenados vayan a prisión. Por el momento no pueden ausentarse del país, debiendo solicitar permiso toda vez que se ausenten de su domicilio por más de 24 horas. Irán al «purgatorio» en tránsito al «infierno» del que difícilmente se salven.
El miércoles en medio de un impresionante operativo policial y una multitud conformada por padres y allegados de las víctimas y fans del grupo Callejeros, la justicia dio a conocer su sentencia.
Para Omar Chabán, el excéntrico explotador del local Cromagnón en el cual se desarrolló el recital de la tragedia, le dieron 20 años de cárcel por coautor de incendio doloso seguido de muerte. Por los mismos cargos fue condenado a 18 años de prisión el representante del grupo Callejeros, Diego Argañaráz, mientras que a las dos funcionarias municipales que no controlaron que el local cumpla con las especificaciones necesarias en materia de seguridad, Ana María Fernández y Fabiana Fiszbin 2 años. Al asistente de Chabán, Raúl Alcides Villarreal, 1 año por el pago de coimas a la policía.
El grupo Callejeros (Fontanet, Delgado, Torrejón, Vázquez, Carbone, Djerfy, Cardell, Belay y Torres), para indignación de los familiares de las víctimas, fue absuelto. El tribunal consideró que si bien la banda toleraba el uso de la pirotecnia en sus recitales, no participaron en el hecho doloso. «No hubo voluntad de los músicos de provocar el incendio», se pronunció el tribunal.
En el recinto se produjeron dramáticas escenas con gritos, desmayos y crisis de nervios, arremetiendo algunos familiares contra los vidrios blindados que separaban a los acusados del público, generándose en las afueras de tribunales una descomunal gresca entre la policía, los familiares de las víctimas que habían quedado afuera y simpatizantes del grupo Callejeros. Si bien al conocerse las condenas de Chabán y Argañaraz se escucharon aplausos y gestos de satisfacción entre la concurrencia y en las afueras de tribunales (la gente escuchaba la sentencia por televisión desde los bares), cuando se anunció la absolución de Callejeros.
LA EXPLICACIÓN
Según el tribunal, al pronunciar su fallo entiende que quienes se llevaron la peor parte, Chabán y Argañaráz fueron los organizadores del recital, y como tales asumieron el papel de «garantes» del espectáculo y por lo tanto responsables de la seguridad física de los asistentes al mismo, encontrándoselos también responsables de haber pagado coimas para que la policía hiciera la «vista gorda».
En cuanto a los que arrojaron las bengalas o candelas, el tribunal consideró que no tenían dominio del hecho, y que por lo tanto no tomaron en serio las advertencias del organizador Chabán.
EN LIBERTAD
Hasta tanto la sentencia no quede en firme, nadie irá preso. Se presume que vendrán las apelaciones, por lo que podrá pasar mucho tiempo hasta que los condenados vayan a prisión. Por el momento no pueden ausentarse del país, debiendo solicitar permiso toda vez que se ausenten de su domicilio por más de 24 horas. Irán al «purgatorio» en tránsito al «infierno» del que difícilmente se salven.
