sábado, 28 de mayo de 2011

DESCUBRIERON AL QUE LA AMENAZABA


Ahora Nadia Terazzolo duerme tranquila

Una tortura telefónica (mensajes) que comenzó en el mes de abril con amenazas y acciones de todo tipo. Hubo una denuncia, la policía investigó, hasta que finalmente por un rastreo de llamadas fue localizado el autor de las mismas. Le secuestraron el celular, dos chips y una notebook. Si bien habría certezas sobre la identidad del autor, aún la fiscalía no hizo la acusación formal.

«Fue una tortura, no te lo puedo describir, creí que me volvía loca, mi hijo finalmente terminó en el psicólogo porque yo le trasmití todas mis angustias. Te aseguro que no podía creer que fuera él, en ningún momento me lo imaginé, ni aún cuando alguien me lo sugería, incluso la policía. Me mandaba mensajes como si fuera una mujer despechada, había días en que empezaba a las 8 de la mañana y terminaba a la noche. Abrió una página en facebook desde la cual me insultaba, decía que era una puta, un gato de ricos, lo que te imaginés. Pegó carteles en el jardín de mi hijo, inscripciones en el capot de mi auto y en el portón de un vecino, fue una persecución que me tenía loca, también amenazaba a mi actual novio y le enviaba mensajes a mis amigas. Y hasta a mi padre y a mi hermana. Yo cambié el número de teléfono y logró averiguarlo para seguir amenazándome. Lo pescaron porque se pisó, yo le contestaba los mensajes y el respondía, fue ahí cuando localizaron su teléfono, la policía no tiene dudas, en la fiscalía tampoco. Fue un ex-novio con el que corté relaciones en febrero. Se puso loco, no se que le pasó. Estoy pensando en hacerle un juicio con un abogado por tortura moral y otros cargos».

Estas fueron las palabras de Nadia Terazzolo a El Oeste. Como se recordará en nuestra edición del 9 de abril publicamos una nota en forma exclusiva, en la cual decíamos que Nadia se había comunicado con nuestra redacción para referirnos sobre la situación que estaba atravesando.

SE SABE EL PECADO Y EL PECADOR

Todo indica -según sus propias palabras- que el caso está resuelto, aunque desde la comisaría nos informan que toda la investigación fue puesta en manos de la fiscalía para que resuelva en consecuencia. Fue allanada la casa del sospechoso y secuestrados el celular desde el cual hacía presuntamente las llamadas y enviaba mensajes, dos chips y la compu notebook desde la cual también enviaba mensajes y escribía en el facebook. No tienen dudas, así se lo hizo saber una fuente policial a nuestro cronista, pero aún falta la última palabra, la del fiscal.

Queda como aprendizaje el saber que no existen llamadas anónimas, que todo se puede descubrir, que hoy la tecnología no da lugar a este tipo de acciones de acoso a las personas.

Ni bien exista una acusación formal de la justicia contra el presunto autor de las amenazas a la conocida joven, daremos a conocer su identidad.