Su partida terrenal se produjo en la mañana del jueves 6 de agosto
«Cuando un amigo se va...», nos dice el pampeano Alberto Cortez y un cielo de nostalgias nos cubre de recuerdos y sentimientos que anidan en el hueco más cálido del alma. Porque ese amigo que se va, se lleva consigo una querida porción de nuestra vida.
Horas compartidas, sonrisas que nos hermanaron, abrazos del alma que nos unieron, largas rondas de mates que nos comunicaron y los sentimientos mutuos que se
hicieron uno en un abrazo de nostalgias.«Cuando un amigo se va...», físicamente, porque afectivamente seguirá con nosotros compartiendo el camino de la vida y será un permanente cosquilleo de añoranzas en nuestro corazón.
Rodolfo Domingo Alcide, «Rody» para su legión de amigos, familiares y vecinos que lo conocieron y le retribuyeron con su cariño a su bondad, bohonomía y sincero trato sin dobleces.
Porque así era y fue, y lo seguirá siendo a través del mundo de los hermosos recuerdos que nos deja, «Rody», hijo de José «Pepe» Alcide y «Peia» Landaburo...
Ese «Rody» que desde pequeño vivió pegado a su padre guitarrero, nocturnas reuniones, donde colegas del padre, inolvidables cantores locales y distintos artistas y aficionados casarenses, mostraban sus cualidades, mientras que «Rody» se ocupaba de grabar distintas expresiones artísticas, donde han quedado plasmadas la música y la canción de enormes cultores de la misma a nivel local.
Tenista de real habilidad, integró el staff del Nº 1 del tenis argentino, Guillermo Vilas, de quien fue aventajado alumno y continuador de su tarea en los courts locales, donde fue iniciador de muchos en el llamado «deporte blanco», a quienes fue transmitiendo sus conocimientos y cualidades.
Cuando se hizo cargo de la Dirección Municipal de Cultura la Profesora Ada García, su amiga del alma, ingresó como empleado de dicha repartición, lugar que ocupaba actualmente.
En cada uno de esos lugares, Rodolfo Domingo Alcide, fue dejando su marca indeleble de buena persona, amigo de los amigos y salpicando con su innata simpatía cada una de sus presencias tan queridas.
Hace un tiempo, en un accidente de tránsito, «Rody» sufrió problemas que se fueron complicando con el transcurrir del tiempo, y en bacanal transcurrir de su vida, con solamente 54 años de existencia, en la mañana del jueves 6 de agosto, como en el canto de Cortez, «el amigo se fue...». Rodolfo Domingo «Rody» Alcide dejaba de existir físicamente y comenzaba a recorrer el camino de los hermosos recuerdos que lo mantendrá vivo por siempre en el corazón de los muchos que lo quisimos y lo queremos.
En su velatorio, como en el acto de la inhumación de sus restos mortales, ocurrido el mismo jueves 6 a las 17,30 hs. en el Cementerio Municipal, previo responso rezado en la Iglesia Nuestra Señora del Carmen, quedó reflejado el gran dolor que su partida provocara.
Esto, a modo de despedida, lo decimos, desde nuestros sentimientos, con letras nacidas en el alma:
«Rody, sabemos que no te fuiste, que estarás en cada manifestación de artistas locales, en cada sonrisa de alegría sana que se dibuje en nuesta cara, en la calidez de cada mano amiga transmitiendo su calor, en cada court tenístico donde estará tu presencia, en cada instante, donde la amistad sea convocante de distintas reuniones.
¡Que te vas a ir «Rody», si estás volviendo en cada abrazo...!»
