El vecino "Tito" Obón se encontraba en Villa LA Angostura y debió ser evacuado
La lluvia de cenizas prácticamente ha sepultado a la paradisíaca ciudad invernal de Villa La Angostura. Casas, autos, sus calle
s, jardines, el lago, todo está bajo un grueso manto de cenizas que aumenta día a día con las continuas erupciones del volcán chileno Peyehue. Sus pobladores resisten estoicamente sin agua, sin luz y carencias de todo tipo, en un estado de emergencia total que no se sabe cuando terminará. Muchos han debido ser evacuados, especialmente ancianos y enfermos, entre ellos el conocido vecino de esta ciudad Rodolfo «Tito» Obón, convaleciente de un accidente cerebro vascular, que se encontraba en Villa La Angostura en la casa de su hijo médico Alejandro Obón quien desde hace ya muchos años vive en el sur con sus familia. Pero las condiciones en Villa La Angostura, sumadas a la quebrantada salud de «Tito» Obón, que debía ser atendido por una enfermera y una kinesióloga hicieron que su estadía allí sea complicada y riesgosa, razón por la cual su otro hijo Amilcar fue buscarlo, y lo trajo a nuestra ciudad hasta que el volcán deje de vomitar cenizas y la villa recupere su esplendor
